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Cómo manejar la presión arterial alta, un ajuste a ciertos hábitos puede ser muy útil

En primer lugar, vamos a definir el concepto de presión arterial: esta es la fuerza de la sangre al circular por los vasos sanguíneos llamados arterias. Estas llevan la sangre del corazón a los pulmones, donde la sangre recoge el oxígeno, que luego es distribuido a los órganos y tejidos.

Conociendo al contrincante
La presión arterial baja puede causar síntomas como visión borrosa, vértigo, desmayo (síncope), mareo, náuseas o vómitos, somnolencia y debilidad. En cambio, una presión arterial alta puede provocar aneurisma, lesiones en los vasos sanguíneos oculares, cambios cognitivos como memoria errante o falta de concentración, arterioesclerosis o accidentes cerebrovasculares.

Solo conociendo las características y consecuencias de una presión sanguínea alta, podemos tomar las medidas necesarias para tratarla o aliviarla.

¿Cuáles son los factores de riesgo para la presión arterial alta que no puedo cambiar?

¿Qué hábitos afectan mi presión arterial?

Estos son algunos de los consejos más útiles para promover una presión arterial más estable y saludable.

El plan de alimentación Dietary Approaches to Stop Hypertension (DASH), o enfoque dietético para detener la hipertensión, se centra en los alimentos saludables para el corazón y es una excelente alternativa para controlar la presión arterial alta.